Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en palabras.
Cuida tus palabras, porque se convertirán en actos.
Cuida tus actos, porque se convertirán en costumbres.
Cuida tus costumbres, porque forjarán tu carácter.
Cuida tu carácter, porque formará tu destino.
Y tu destino será tu vida.
Ghandi

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Menorca, nuestro caribe

Con una extensión de 702 kilómetros cuadrados y 216 kilómetros de costa, Menorca, es la más oriental de las Islas Baleares, es el primer punto de España donde llegan llegan los rayos de sol. Su territorio está dividido en ocho municipios : Maó, Ciutadella, Alaior, Es Castell, Ferreries, Es Mercadal, Sant Lluís y Es Migjorn Gran.

Menorca fue declarado Reserva de la Biosfera el 8 de octubre de 1993. La denominación forma parte del Programa Hombre y Biosfera (Mab), puesto en marcha por la UNESCO en 1970, una iniciativa que nació para conciliar la mentalidad y el uso de recursos naturales, esbozando el concepto actual de desarrollo sostenible.

Su situación estratégica ha hecho de Menorca un territorio codiciado por las civilizaciones que en su día intentaron dominar el Mediterráneo.
Se estima que los primeros pobladores desembarcaron durante el segundo milenio antes de Cristo. La segunda oleada de pobladores,la cultura talayótica, llegó hacia el 1400 a.C., que dejó entre su legado importantes conjuntos de cuevas.
En las épocas posteriores, fueron varios pueblos los que se asentaron en la Isla, como los fenicios, griegos y cartagineses. Pero sería la dominación romana la más prolongada, desde el 123 a.C. hasta el 902, período que finalizó con la invasión árabe, que hizo que Menorca pasara a formar parte del Califato de Córdoba.
En 1287 tuvo lugar otra nueva conquista, la de la Corona de Aragón, que con Alfonso III al mando restauró de nuevo el cristianismo.
Siglos después, bajo los reinados de CarlosI y Felipe II, Menorca atravesó una de sus épocas más oscuras debido a la constante amenaza de las flotas turcas y berberiscas. En 1535, Maó fue saqueada por Barbarroja a años después los turcos asolaron Ciutadella. Durante el siglo XVIII, pertececió a la corona británica y en 1802, Gran Bretaña y España firmaron el tratado de Amiens, por la que la Isla retornó a ser española.

martes, 29 de septiembre de 2009

Ciutadella



Ciudad con aire señorial que se percibe recorriendo sus calles. Hasta la denominación británica fue centro administrativo, actualmente sigue siendo la capital eclesiástica y sede del arzobispado.
El centro neurálgico de la ciudad es la plaza des Born, donde se encentra el Ayuntamiento, un edificio del siglo XIX de estilo ecléctico.




Justo en medio de la plaza des Born, está el obelisco erigido en el mismo siglo en conmemoración del desastre ocurrido en el "any de sa desgràcia"(el año de la desgracia, 1558), cuando los turcos saquearon la ciudad. En los alrededores de la plaza también se encuentra los principales palacios señoriales.


Nada mejor para conocer la ciudad que perderse por sus calles, sin rumbo y sin mapa, sólo con los sentidos preparados para captar sonidos, olores, sabores ,sensaciones y recuerdos de otra época a la que nos trasladamos cuando observamos cada puerta, cada escudo, cada callejuela que invita al paseo.


Despúes del paseo por las calles de la ciudad, es de obligada visita el puerto de Ciutadella. una entrada natural del mar de 500 metros en su bocana, aunque la ensenada se estrecha considerablemente según avanza hacia el otro extremo, lugar que los menorquines denominan "colàrsega". Las márgenes de la ensanada cuentan con una extensa hilera de restaurantes especializados en ofrecernos los manjares autóconos aportados por los pescadores locales que todavía faenan en la zona.
El puerto es conocido por ser el escenario de un fenómeno natural denominado "rissaga" y que consiste en la oscilación del nivel del mar, comenzando con unas variaciones pequeñas pero que pueden llegar a dejar al descubierto el fondo marino del puerto en su zona menos profunda. Dicen los lugareños, que la época en que se dan las condiciones meteorológicas para que se dé el fenómeno suelenser los meses de junio, julio y agosto.

lunes, 28 de septiembre de 2009

Cova d´en Xoroi



Espectacular de día y de noche...así es la Cova d´en Xoroi.

En este lugar privilegiado se encuentra la discoteca Cova d’en Xoroi, situada en el interior de una gruta de un acantilado con unas visitas maravillosas al Mar Mediterráneo. Un lugar cargado de belleza.

Cova d’en Xoroi esta en la isla de Menorca su encanto reside en el hecho de su situación inmejorable, la discoteca se encuentra localizada dentro de una cueva y su terraza, a la que se accede mediante una escalera con casi 100 peldaños,en un acantilado con vistas al mar.

La discoteca se encuentra abierta desde primera hora de la mañana donde puedes tomar alguna copa en su terraza mientras contemplas la belleza del paisaje. Al caer el sol el lugar crece en espectacularidad y los visitantes empiezan a llegar al lugar para esperar a media noche para disfrutar de una velada maravillosa.

Cuenta la historia que en estos peñascos vivió un tal Xoroi, posiblemente un navegante que debió naufragar y se alojó en esta cueva, pasaron años y una joven de un pueblo de alrededor desapareció al cabo de unos años se encontró a la joven junto a Xoroi y con tres hijos frutos del amor. Xoroi viéndose acorralado por quienes le habían encontrado y temiéndose lo peor se lanzó al mar junto a su hijo mayor. No es más que una leyenda que encierra todavía más encanto al lugar.



Piérdete por sus cuevas con tus amigos, tus amigas o tu pareja y disfruta del entorno y de su música; la entrada cuesta 23 euros con derecho a una consumición. Si te gusta los coktails, te recomiendo que pruebes los mojitos, son los mejores que he tomado, posiblemente porque el entorno ayudaba.


domingo, 27 de septiembre de 2009

Maó

La última etapa de mi viaje en Menorca fue la ciudad de Maó, centro administrativo de la isla desde que los briatánicos así lo establecieron en el siglo XVII.
Con la mañana avanzada y un sol de justicia nos dirigimos hacia la fortaleza de "La mola", mandada construir por Isabell II entre 1848 y 1847, para defenderse de la presión británica que amenazaba con volver a la isla para utilizarla como base de defensa contra los franceses.
Nuestra visita fue comentada por nuestro guia "chelero" particular, ( siempre es recomendable viajar con un licenciado en historia) y amenizada por las variadas bromas que gastábamos el pequeño grupo que le seguíamos en sus explicaciones.
"La mola" actualmente, también es utilizada como centro de exposiciones o lugar donde se celebran conciertos al aire libre.
Las vistas de la ciudad de Maó son espectaculares como podréis comprobar en la foto, de una aficionada, que os muestro a continuación.









Tras finalizar nuestra visita a la fortaleza, una hora y media más o menos, el taxi nos llevó al centro de la ciudad, donde para mi sorpresa, descubrí una ciudad con grandes toques británicos e inumerables lugares de interés que no se podían visitar en el poco tiempo que nos quedaba para llegar al aeropuerto y embarcar, es verdad que si hubieramos sabido que nuestro vuelo se iba a retrasar dos horas, hubieramos aprovechado más tiempo en descubrir la ciudad, que a diferencia de los comentarios de amigos que habían estado con anterioridad me gustó más que Ciutadella.








Nuestra pequeña escapada terminó cuando llegamos al aeropuerto, cansandos pero contentos porque nuestro viaje había resultado especial y graticante, habíamos descansado en las maravillosas playas de Menorca, visitado los lugares que llevábamos planeados, y habíamos dejado atrás la rutina de nuertos trabajos y regresabamos con las pilas recargadas.
A la 1.30 de la madrugada llegaba a mi casa, con la mochila llena de experiencias, imágenes, vivencias, cansacio y el buen sabor que simpre deja un viaje. Y teniendo la certeza de que viví no sólo aquello que deseaba, sino que también me dejé sorprender por aquello que no esperaba.

Todos debemos recordar que "para viajar en grupo , o en pareja, de forma pacífica es necesario que cada miembro se comprometa a llevar en su maleta cinco cualidades emocionales, imprescindibles para disfrutar plenamente de la experiencia: paciencia, flexibilidad, respeto, sentido del humor y gratitud"

Goodbye my lover

Nada mejor para comenzar este nuevo viaje que con música, empezamos con una de mis tantas canciones favoritas, música impecable y letra espectacular, ¿relamente será posible sentir lo que nos canta James Blunt?